jueves, 31 de octubre de 2013

Buñuelos de Viento de Alosno



Alosno, calle real del Alosno
con sus esquinas de acero
es la calle más bonita
que rondan los adorneros
calle real del Alosno.

El mal pago
cuantos paseos me debe
adiós calle del mal pago
cuantas veces ma empapo
la sombra de tus paredes
las tejas de tu tejaos.

La esquina
bañaron tus resplandores
al reborde de una esquina
sabes que tu niña
al coronarte de flores
de lirios y cabellinas.


Alosno, Calle Real del Alosno
con sus esquinas de acero
es la calle más bonita
que rondan los adorneros
Calle Real del Alosno.


Camarón de la Isla

De Alosno (Huelva)


Vísperas de Todos los Santos, he rebuscado por ahí algunos de los dulces típicos por estas fechas y me he encontrado con estos exquisitos Buñuelos de Vientos que he rellenado con crema pastelera y leche condensada.

Reconociendo en ello que he seguido las directrices de mis hijas.

Pasan los días y uno se encuentra estar deseando echar manos a níscalos y gurumelos, llega un tiempo rico en la gastronomía; la navidad se acerca y con ello un auténtico reto culinario. Continuemos pues avanzando y dejando que lleguen los platos a nosotros.

Ricardo, a 31 de de octubre de 2013


El pueblo de Alosno, se fundó en el año 1444, por traslado forzoso desde El Portichuelo, distante a pocos kilómetros. El traslado se debió a la repercusión poco saludable que en sus habitantes producían las aguas ácidas procedentes de las minas. De dicho lugar se tienen referencias desde la segunda mitad del siglo XIII en que Alfonso X El Sabio reconquistó las tierras, posteriormente pertenecientes al Condado de Niebla.

A partir de 1812, con la desaparición de los señoríos, Alosno se convierte en villa, conociendo algunos momentos de máximo esplendor y prosperidad basados en la industria y el comercio.

Desde finales del siglo XIX hasta finales del siglo, la economía de Alosno se basó fundamentalmente en la minería

Destacamos algunas de sus Fiestas

Luminarias de San Antonio Abad (enero): El día 16 de enero se hacen grandes fogatas en honor del santo (protector de los animales) por las que saltan caballos, mulos y burros para que sean protegidos de todo tipo de enfermedades.

Pascua de la Lechuga (marzo-abril): El Domingo de Resurrección los alosneros se reúnen en el campo llevando un muñeco de paja que simboliza a Judas, al que se le dispara con escopetas para quemarlo al final de la celebración. Es imprescindible llevar lechuga y el típico bollo de pringue con huevos dentro.

Cruces de Mayo (mayo): Se celebran los dos primeros fines de semana del mes de mayo. Pasadas las doce de la noche se abren las «colás», típicamente engalanadas, en las cuales las mujeres cantan y bailan al pie de la Cruz, esperando la llegada de las reuniones de hombres quienes, al son de guitarras y fandangos, van por las calles portando un canasto de caña con bebidas.

Corpus Christi (mayo-junio): El pueblo se engalana con altares y el suelo se alfombra con helechos, juncos y romero (juncia). Al pasar la procesión los niños recogen la juncia de la calle para hacer camas y jugar con sus amigos.

Romería de San Antonio de Padua (mayo-junio): Se celebra a finales de mayo o principios de junio. El sábado, después de la misa, la procesión recorre algunas calles del pueblo precedida por la danza de las espadas, recuperada después de cuarenta y dos años. El domingo, peregrinos y caballistas acompañan a la carreta del Simpecado camino del lugar donde se celebra la romería.

Fiestas patronales de San Juan Bautista (junio): El día grande de esta fiesta es el 24 de junio, día de la festividad de San Juan Bautista. Las noches precedentes a la fiesta se realizan en la puerta de la Hermandad los ensayos de la danza de los Cascabeleros. El día 23 de junio se celebran los toques de vísperas en la Casa-Hermandad. A las cinco de la madrugada el tambor recorre las calles del pueblo tocando la Alborá en las casas de los hermanos más renombrados. 

Procesión de San Juan Bautista y cascabeleros.

Danza de los Cascabeleros de San Juan Bautista: Su origen no ha podido determinarse con exactitud, pero se emparenta con ceremonias y tradiciones tartésicas, vinculadas al solsticio de verano. Esta danza consta de «diez pasos distintos que se bailan alrededor del tambor y del Maestro de Ceremonias, que es quien marca con su vara el cambio de las distintas mudanzas, o pasos». El grupo de danzantes lo componen diecinueve hombres, formando tres de ellos la cabeza y los dieciséis restantes se agrupan en ocho parejas Es una danza pagana, convertida en religiosa al adaptarla a la fiesta de San Juan Bautista y tiene significación de ofrenda por parte de los hombres de Alosno a su patrón. No podemos olvidar que es una danza de gran fuerza y virilidad, residiendo en los pies de los danzantes todo el contenido de la misma. En la folía, que es la apoteosis de la danza, florecen los brazos de los cascabeleros saludando al aire con chasqueos de palillos".

Las Jachas (diciembre): Se celebran el día 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada Concepción. Las Jachas son gigantescas columnas hechas con gamones (tallos largos y secos), adornadas con banderas y papeles de colores. La noche del día, se prenden fuego a las mismas para simbolizar la pureza de la Virgen, acompañándose la quema con cantos populares.

Romería de La Rama (diciembre): Es una romería que se celebra a mediados de diciembre y en la que el pueblo sale al campo para recoger las ramas que adornarán los Portales de Belén de cada casa.


INGREDIENTES

300 gramos de harina de trigo

Un sobre de levadura en polvo tipo Royal

50 gramos de mantequilla

Tres huevos

Un vaso de unos150 ml de leche entera

Un vaso de unos 300 ml. de agua

Tres cucharadas de azúcar

Una corteza o cáscara de limón

Ralladura de media naranja

Azúcar glas para espolvorear

Canela en polvo

Aceite de oliva virgen extra

Sal.


ELABORACIÓN 

Preparamos todos los ingredientes, lavamos la naranja y el limón.

En un cazo depositamos la leche y el vaso de agua, añadimos también la corteza de limón, la mantequilla, el azúcar y una pizca de sal.

Tamizamos la harina y le añadimos la levadura.

Colocamos el cazo en el fuego y cuando comience a hervir agregamos la harina junto a la levadura.

A fuego suave removemos bien la mezcla, hasta conseguir una masa homogénea y sin grumos.

Aumentamos el fuego y cocemos hasta que veamos que la mezcla se separa de las paredes del perol o cazuela.

Retiramos aguardando a que la masa se temple.

Añadimos ahora los huevos, poco a poco, y sin parar de remover.

La tradición nos dice echarlos de uno en uno.

Una vez obtengamos una masa uniforme y con la ayuda de una cuchara tomamos la medida para formar los buñuelos

Freímos en una sartén con abundante aceite, bien caliente y hasta que veamos que están dorados.

Retiramos los buñuelos y los depositamos sobre un plato con papel absorbente, para que absorba el exceso de aceite.

Ahora tan sólo hay que espolvorear los buñuelos con una mezcla de azúcar glas y la canela en polvo.


OBSERVACIONES

Los buñuelos de viento pueden ser rellenos dulces de crema, chocolate, chantillí, etcétera.

Es un postre que aparece en las pastelerías a comienzos de noviembre, ya que tradicionalmente se sirven en las celebraciones de Todos los Santos.

También hay quien agrega un vasito pequeño de anís a la masa

Los judíos sefardíes elaboran desde el siglo X para celebrar la Janucá unos bollos fritos con harina de trigo que denominan bimuelos. La introducción de estos bollos en la celebración de Todos los Santos es una modificación cristiana, por la cercanía con la Janucá judía.

La dificultad de este postre radica en la temperatura del aceite, ya que si está poco caliente la masa cae al fondo y debe procurarse que se mantenga a flote, pero si está demasiado caliente se forma una envoltura seca alrededor del Buñuelo que impide que éste crezca. Los rellenos suelen introducirse después de su elaboración mediante una pequeña abertura elaborada a tal efecto.

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